El mirador del Picón de Mariota se encuentra en el corazón de las arribes, Aldeadavila de la Ribera.
Aldeadávila, que es conocido como el corazón de las arribes, se encuentra en uno de los tramos más espectaculares del recorrido del Duero por el Parque Natural Arribes del Duero que engloba las provincias de Zamora y Salamanca.
Este pueblo es conocido por las vistas increíbles que podemos tener desde diferentes miradores sobre el río Duero, que durante un gran tramo se encuentra encauzado entre paredes graníticas, llegando en algunos puntos a tener una altura de cerca de 400 metros, poco antes de que el hombre construyese una de las mayores presas hidroeléctricas a nivel europeo tanto a nivel de producción como a nivel de altura de su dique.
Los miradores de picón de Felipe y del Fraile nos ofrecen balcones privilegiados desde el que contemplar la combinación perfecta entre naturaleza y mano del hombre.
Otro de los lugares en el que confluyen muchas de las visitas a la localidad es la Playa del rostro, una playa artificial creada a la orilla del río y desde el que podremos disfrutar de un paseo en barco hasta la presa de Aldeadavila disfrutando de la caprichosa orografía, en muchos casos acompañados del vuelo de aves tales como buitres, águilas, alimoches o la huidiza cigüeña negra
El Mirador del Picón de Mariota se encuentra en las cercanías de la playa del rostro y es que en el camino de bajada hasta el embarcadero nos encontraremos con una señalización a la derecha que nos llevará a través de un camino hasta este mirador. Está situado sobre un gran meandro del Duero, dejando a nuestra derecha la desembocadura del rio Uces, lugar donde en invierno y primavera podremos disfrutar entre otros atractivos de la gran cascada del Pozo de los Humos, compartida por Masueco y Pereña. Y a nuestra izquierda dejaremos el embarcadero de la playa del rostro, donde además de los mencionados cruceros también podremos pasar un rato agradable realizando actividades de piragüismo.
El mirador se encuentra a unos 800 metros de camino que nos lleva hasta el rostro.
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