El pasado miércoles se dio un nuevo paso en la apertura de la mina de wolframio de Barruecopardo, en las arribes.
El miércoles pasado Saloro, la empresa que explotará la mina de wolframio en la localidad de las arribes, de Barruecopardo abono al ayuntamiento el importe correspondiente al uso de los caminos y terrenos municipales que correspondía al ejercicio 2014.
Este hecho difiere del acuerdo previamente firmado, y es que en dicho acuerdo se establecía que el abono de esta partida se haría una vez que ya estuviese expedida por parte del ayuntamiento de la localidad salmantina la licencia de apertura, lo cual aún no se ha ejecutado.
Otras de las gestiones que Saloro viene realizando en paralelo a las gestiones con comunidad y ayuntamiento, es la certificación ante notario de las diferentes compras y arrendamientos de terrenos con los diferentes propietarios.
El wolframio o también conocido como tungsteno tiene la principal característica de tener un altísimo punto de fusión, lo que le permite soportar elevadas temperaturas sin deformarse. Otras características que se le pueden atribuir a este mineral pueden ser entre otras ser un excelente conductor, o ser uno de los minerales más duros solo superado por el diamante.
Este mineral en nuestro día a día está más presente de lo que nos podemos imaginar, se utiliza en diferentes partes de los coches, maquinaria, teléfonos móviles, circuitos, e incluso en sistemas de iluminación.
Con la reapertura de esta mina de Barruecopardo, se continuará con la historia de esta mina que comenzó su producción allá por el año 1900, estado activa hasta el año 1982. Durante este periodo de tiempo esta mina fue una de las más importantes de Europa a nivel de producción, objetivo con el que vuelve en su reapertura.
Comentarios (1)